Los jugos son conocidos por ser poderosas herramientas para mejorar nuestro sistema inmune del cuerpo. Para regenerar nuestros tejidos y son además, por su gran contenido de nutrientes, excelentes como herramientas de prevención por ello podemos usar los jugos como antibiótico natural y casero.
Cómo prepara un antibiótico casero
Un jugo fresco podría salvar tu vida y ser un antibiótico natural. Los jugos y vegetales con grandes propiedades, tienen la fuerza para dar recuperación y rejuvenecimiento a personas con diversos problemas de la salud. Dado que es en forma líquida, los jugos son fáciles para ser digeridos y absorbidos, por lo que resulta bueno para personas sin apetito, problema de digestión y de intestinos.
Los jugos son una bebida que es más fácil que las verduras de digerir. Los jugos contienen nutrientes y aumentan la fuerza del cuerpo para prevenir la enfermedad. Hay jugos que pueden ser diseñados para diferentes padecimientos, para fortalecer el hígado, para ayudar a aclarar riñones, para la circulación sangínea, para fortalecer los nervios y el sistema inmunológico.
Jugo antibiótico hecho en casa
Además, hay jugos que también han sido creados como antibióticos naturales, dado que las propiedades de los vegetales que lo integran, son beneficiosos para evitar o corregir infecciones. Personas que sufren de infecciones crónicas por lo general consumen antibióticos.
El consumo de antibióticos a largo plazo podría dañar la función del corazón y el sistema inmunológico. También consumirlos continuamente resultan ineficaces porque mejoran la inmunología del microorganismo que causa la infección.
Cómo usar los jugos como antibiótico natural
Para controlar nuestro cuerpo, debemos estimular la red infectada y estar en oposición a los microorganismos con jugos antibióticos naturales, sobre todo cuando la infección no se encuentra en un estado avanzado y grave, que para eso tendrías que siempre buscar asistencia médica profesional.
Si nuestras infecciones sean crónicas o no, como las que provienen de resfriados y gripes, de estómago, cutáneas, u otras, pueden ser tratables de una manera controlada por nosotros, podemos probar con jugos antibióticos hechos en casa, que son totalmente naturales y además llenos de nutrientes que son de refuerzo para otras partes de nuestro cuerpo.
Este jugo antibiótico es bueno para la gente que sufre de las enfermedades siguientes:
1. Bronquitis o asma crónica.
2. Influenza.
3. Infección de oídos y sinusitis.
4. Microorganismos malos en los intestinos.
5. Cansancio.
6. Infección de la piel.
7. Herida crónica.
8. Quistes causado por la infección.
9. Caspa en el cuero cabelludo.
10. Espinillas.
11. Hepatitis A / B / C.
12. Infección y la enfermedad de las encías y dientes crónica.
13. Herpes.
14. Tuberculosis.
Esta receta jugo actúa como antibiótico natural y antiséptico fuerte, y cuando siendo bebida regularmente podría combatir la infección directamente.
Un vaso (300 a 400 ml), debe ser bebido cotidianamente por personas con enfermedades crónicas, preferentemente en ayunas.
Ingredientes:
- 1 zanahoria
- 1 remolacha
- 1 manzana
- ½ cm de jengibre
- ½ cm rábanos
- ½ vaso de jugo de apio
- 1 rodaja de piña
- 1 diente grande de ajo
- 1 puñado de tomillo fresco
Nota: La mejor manera de beber el jugo, es inmediatamente después de la preparación, a temperatura ambiente, ya que si los jugos recién exprimidos quedan sin tomar por un tiempo entrará en contacto con el oxígeno y perderán sus propiedades curativas y el antibiótico natural perderá su efecto.
Lava todos los ingredientes, córtalos en trozos pequeños, y mételos en el exprimidor o licuadora. Si el sabor es demasiado fuerte, diluir con medio vaso de agua o eliminar el jugo de apio.
Todos sabemos que la naturaleza es verdaderamente milagrosa y sus productos pueden ayudarnos contra muchas enfermedades y problemas de salud, pero cuando se trata de propiedades anti-bacterianas, la naturaleza realmente brilla.
Este es sólo un ejemplo de jugo que puedes tomar como prevención y apoyo mientras padeces de alguna infección. Es un antibiótico natural que puedes preparar día a día en casa, pero puedes probar haciendo más variedades del mismo agregando otros ingredientes iguales de beneficiosos para este fin, pero recuerda que siempre debes ir apoyado por un profesional de la salud, sobre todo que pueda llevar el récord de las causas de tu infección o infecciones, y cuándo saber si esa infección necesita otra manera de ser tratada.
Redacción: equipo de Vida Lúcida