Pediatra de Harvard comparte 5 cosas que no hace con sus propios niños cuando están enfermos

Como todo padre, sé lo difícil que es cuidar a un niño enfermo. Implica una mezcla abrumadora de emociones: miedo, amor, confusión, preocupación y tristeza. Y cuando tu hijo está enfermo, lo último que necesitas es sentirte abrumado por información contradictoria o consejos no solicitados. Solo quieres que se mejoren.

1. No despierto a mis hijos para la medicación

Si tienen fiebre pero están durmiendo, nunca los despierto para darles medicación. El sueño es importante para la curación, recuperación y crecimiento, y puede ser difícil de conseguir cuando tu hijo tiene tos o congestión que los mantiene despiertos.

Aunque puede ser alarmante cuando tu hijo tiene fiebre, si están cómodos y descansando, no es una emergencia que requiera medicación en este momento.

Al permitirles descansar, es posible que su sistema inmunológico esté mejor preparado para hacer su trabajo y ayudar a combatir los virus.

2. No dudo en dar medicamentos para controlar la fiebre

Nunca dudo en darles medicamentos para controlar la fiebre si se ven incómodos. Si tu hijo tiene fiebre y está respirando más rápido o con dificultad, bebiendo menos líquidos, o tiene problemas para descansar, no dudaría en darles medicamentos ampliamente utilizados, seguros y efectivos como el acetaminofeno y el ibuprofeno para aliviar la incomodidad.

Pero si te das cuenta de que les estás dando estos medicamentos tres o cuatro veces al día durante más de tres días, probablemente sea hora de ver al médico.

3. No me enfoco en la temperatura sino en su apariencia

No me concentro en la temperatura en lugar de en su apariencia. Los termómetros no son los instrumentos más precisos, y a menudo pueden causar pánico.

Observa a tu hijo antes de entrar en pánico. Si se sienten como ellos mismos, están respirando normalmente y están bien hidratados, probablemente no sea una emergencia.

Sin embargo, si se ven muy enfermos y tu termómetro dice que no tienen fiebre, pueden necesitar atención médica.

4. Solo uso miel para la tos

Nunca uso nada más que miel para ayudar con la tos. Los medicamentos para la tos como la codeína o el dextrometorfano pueden hacer más daño que bien, y la Academia Americana de Pediatría desaconseja su uso.

Los jarabes para la tos con muchos medicamentos en un solo producto pueden aumentar el riesgo de errores de medicación. Por seguridad, para niños mayores de un año, solo uso miel o jarabe para la tos con miel como ingrediente principal.

Se ha demostrado que funcionan igual de bien que otros medicamentos, pero con menos riesgos.

5. No utilizo cucharaditas para medir la medicina

Nunca mido la medicina en cucharaditas. Casi 700,000 niños enfrentan errores de medicación cada año, y los niños pequeños tienen el mayor riesgo.

Las dosis para niños varían según la edad y el peso, y las cucharaditas tienen tamaños diferentes. Por seguridad, siempre doy información de dosificación en mililitros para mejorar la precisión y prevenir errores.