Síntomas del trastorno alimenticio y cómo tratarlo

Se estima que un 3% de las niñas, adolescentes y jóvenes presentan algunas de las 2 variedades principales del trastorno alimenticio:  Anorexia y Bulimia. Hasta un 6% pueden tener alguna otra variante clínica.

Qué son los trastornos alimenticios y cómo pueden afectarnos

Variedades del trastorno alimenticio

Se trata de la tercera enfermedad más frecuente después del Asma y la Obesidad durante la adolescencia.

La frecuencia de la anorexia oscila entre 1 a 2 %, mientras que la bulimia es de 2 a 4 %.

Anorexia

La anorexia nerviosa o anorexia se ha descrito desde la antigüedad. Hay reportes que indican que existe desde el siglo II.

Se define como una enfermedad psiquiátrica de origen multifactorial que  se caracteriza por una pérdida de peso voluntaria que condiciona una serie de consecuencias orgánicas. Hay factores causales involucrados: genéticos, biológicos, psicológicos y sociales.

Se basa en un miedo exacerbado e irracional a ganar peso y a una deformación de su propia percepción o imagen corporal.

Hay toda una serie de hábitos alimentarios anormales que se adquieren en el transcurso de la enfermedad, que pueden servir de guía u orientación para detectar de forma precoz el desarrollo de esta enfermedad:

  • Excesiva manipulación o preparación de los alimentos (lavarlos, quitar la grasa, dividirlos, picarlos).
  • Rechazo o repulsión selectiva de algunos alimentos.
  • La realización de rituales o comportamientos repetidos inusuales, que pueden ser catalogados como obsesivos, en relación al momento de comer o preparar alimentos.
  • Comer separado del grupo familiar o en forma aislada.
  • Hacer alguna actividad diferente durante el proceso de comer. Pacientes que comen y caminan en su oficina o casa durante las comidas. Este efecto sirve de distracción para evitar sentir rechazo a los alimentos.
  • Personas que tardan demasiado en comer, sin tener una excusa o razón para ello.
  • Cambios inusuales e irracionales en los horarios de comida.
  • Interés excesivo y casi exclusivo por los temas de nutrición y alimentación.
  • Se muestra un gran interés por el tipo y cantidad de comida del grupo familiar.
  • Deseo de que el grupo familiar coma en forma abundante.

Características principales de la anorexia

Adelgazamiento severo que llega a la emaciación. Son personas con peso normal o bajo, con un cuidado excesivo en las cantidades de alimentos a ingerir y con mucho temor a subir de peso. Tienen una imagen corporal totalmente distorsionada. Se consideran obesos o con sobrepeso cuando en realidad están por debajo del peso normal.

Manejan en forma obsesiva el tema de la alimentación y la pérdida de peso. Racionan la comida en forma muy cuidadosa, pesan los alimentos y preparan raciones extremadamente pequeñas.

Tienden  a pesarse varias veces al día.

Presentan episodios o crisis de comidas copiosas, que comúnmente se llaman atracones. Luego de ello, pasan por un periodo de dieta severa, aumento inusual del nivel del ejercicio físico, vómitos provocados, abuso de medicamentos como los diuréticos, laxantes o enemas.

Amenorrea o falta de menstruación en adolescentes y jóvenes

Signos y síntomas como consecuencia del trastorno anoréxico:

  • Osteopenia u osteoporosis.
  • Alteraciones en piel y anexos, con cabello y uñas quebradizas, piel seca y agrietada.
  • Síntomas de anemia: somnolencia, palidez en piel y mucosas, cansancio, poca tolerancia al ejercicio, debilidad generalizada.
  • Estreñimiento acentuado.
  • Alteración en signos vitales: con tendencia a presión arterial baja, disminución de frecuencia cardiaca y respiratoria.
  • Disminución en la atención y capacidad intelectual o rendimiento académico.
  • Disminución de la temperatura corporal.
  • Neuropatía periféricas y dolores musculares.
  • Cefaleas (dolor de cabeza) frecuentes.
  • Infertilidad.

Bulimia

La Bulimia fue descrita en 1979, y se diferencia de la anorexia porque los pacientes hacen atracones o ingestas copiosas de comida frecuentes para luego intentar expulsar,  por medio de vómitos inducidos o a través de medicamentos como diuréticos y laxantes, usados en forma arbitraria.

Estos pacientes tienden a tener peso normal o incluso elevado. Los episodios de atracones puede ocurrir un par de veces a la semana o ser tan frecuentes como varias veces al día, dependiendo de lo avanzado del trastorno. La persona pierde el control completamente de sus comidas, raciones y de la necesidad de vomitar o evacuar la comida en forma forzada.

Suelen incorporar periodos de ayuno para compensar los atracones, así como, el ejercicio o actividad física excesivos.

Al igual que en la anorexia nerviosa, tienen un miedo excesivo e irracional a aumentar de peso, y tienen una distorsión de su propia imagen corporal, tanto que pueden evitar presentarse mucho en público y tienen sentimientos de asco o vergüenza hacia sí mismos.

Síntomas de la Bulimia

Pueden presentarse síntomas derivados de la malnutrición, así como por la provocación repetitiva de vómitos

  • Dolor e inflamación de la garganta, puede llegar a presentar cambios crónicos en la salivación, con inflamación de las glándulas salivales.
  • Alteraciones odontológicas, provocadas por el cambio de PH en la boca, secundario a vómitos repetidos y reflujo del contenido gástrico. Se pueden observar múltiples caries, desgaste del esmalte dental y enfermedad periodontal.
  • Síntomas gastrointestinales como dolor tipo cólico, ardor en el estómago, cambios de hábito intestinal frecuentes, síntomas de reflujo gastroesofágico, provocados por los vómitos y el uso inadecuado de laxantes.
  • Síntomas secundarios a pérdidas excesivas de líquidos y electrolitos por vómitos y diarreas forzadas por laxantes. Pueden presentar deshidratación y alteraciones en los niveles de magnesio, potasio, calcio, fósforo y sodio, con diferentes consecuencias en muchos órganos.

Tratamiento de los trastornos alimenticios 

El tratamiento en estos casos se basa en cuatro principios básicos

  1. Psicoterapia personal y/o terapia de familia.
  2. Atención médica, para mejorar las consecuencias orgánicas del trastorno alimenticio. En casos severos se necesita hospitalización. Tratamientos hormonales si fuese necesario corregir alteraciones secundarias, particularmente en la fertilidad y trastornos menstruales. Incorporar suplementos nutricionales.
  3. Asesoramiento nutricional cercano, para corregir malos hábitos. Suspender laxantes y medicamentos auto indicados, así como reducir el nivel de ejercicio en la fase de recuperación.
  4. Tratamiento farmacológico, de ser necesario para el mejor manejo de casos más severos que ameriten terapia con medicamentos en forma adicional.

En el caso de la Bulimia funciona muy bien el uso de antidepresivos, que además pueden ser útiles en el manejo de la depresión y/o ansiedad que subyace en estos pacientes.