Causas del dolor de mama y cómo tratarlo

El dolor de mama se conoce también como mastalgia y cuando está relacionado con el ciclo menstrual se denomina, mastodinia.

Conoce las causas del dolor de mamas y dolor en los pezones

Es una causa frecuente de consulta médica y ginecológica, ya que la mayoría de la población femenina en edad fértil presenta algún tipo de dolor de mama en algún momento de su vida.

En ocasiones, no suele dársele la importancia que amerita, por considerarse algo normal o pasajero, muchas veces relacionado con la menstruación. En otros casos al ser leve, se suele acudir a la automedicación por lo que no se busca una valoración especializada.

Causas del dolor de mama

El dolor de mama puede ser subdividido en dos grandes subgrupos según su asociación con la menstruación o no.

El dolor de mama más frecuente es conocido como “cíclico” y es el que está relacionado a la menstruación por lo que se da regularmente con la cercanía del periodo menstrual.

El dolor de mama “no cíclico”, es el que agrupa todas las otras causas de dolor de mama que son independientes del día de la menstruación, pudiendo llegar a mantenerse constante o aliviar con el tiempo.

Sus causas varían desde traumatismos que impactan directamente al seno hasta procesos infecciosos.

Dolor de mama relacionado al ciclo menstrual

Es necesario aclarar que un dolor leve de las mamas difuso, bilateral y pasajero es normal, durante los días previos a la llegada de la menstruación y en algunos casos, forma parte del llamado síndrome premenstrual.

A medida que avanza la segunda mitad del ciclo menstrual puede intensificarse el dolor en mamas y desaparecer una vez que inicia la menstruación, debido al declive hormonal de progesterona y estradiol que se produce en esos días de manera fisiológica para permitir la menstruación.

Otra causa capaz de generar dolor en mamas asociado con la menstruación es la patología fibroquística mamaria, ya que, a pesar de ser una patología benigna, los pacientes suelen presentar dolor de forma cíclica con los cambios hormonales a nivel localizado en las distintas formaciones quísticas.

Causas de dolor mamario no menstrual

  • Procesos infecciosos: como abscesos mamarios o mastitis (término con el que se conoce la inflamación de la mama).
  • Traumatismo directo: cualquier traumatismo directo en la mama o pezón, generara un dolor localizado posterior al evento que debería remitir a los pocos días.
  • Embarazo: debido a los cambios hormonales fisiológicos surgidos por la gestación, el tejido mamario se prepara para la lactancia.
  • Lactancia: produce especialmente dolor en los pezones, debido a la succión del bebé, ya que el pezón puede agrietarse o inflamarse.
  • Intervenciones quirúrgicas mamarias: cualquier cirugía previa, sea por toma de biopsia, reducción o aumento de tamaño, podría dejar alguna secuela y presentar dolor en mama o pezones.
  • Neuritis intercostal: por inflamación de los nervios intercostales, que pueden generar dolor al tacto, de forma localizada en la mama.
  • Tamaño de las mamas: un gran volumen mamario es capaz de producir dolor por el peso y presión sobre los músculos a nivel de tórax.
  • Fármacos: en el caso de algunas pacientes el uso de anticonceptivos orales, inductores de la ovulación como el citrato de clomifeno o gonadotropinas, terapias de reemplazo hormonal, entre otros pueden producir hipersensibilidad en mama, generando dolor al tacto o roce.

Tratamiento del dolor de mamas

En primer lugar, se debe precisar las características del dolor y complementar con la evaluación física e interrogatorio del paciente para definir la causa subyacente.

 En caso de que el dolor no ceda espontáneamente, existen medidas generales que te podrían servir para regular y mejorar los síntomas.

  1. Reducir la ingesta de cafeína (café, el té, etc.) y el chocolate, puede ser un buen primer paso que tomar para reducir o prevenir los quistes mamarios que a pesar de ser benignos pueden generar dolor.
  2. Una dieta rica en fibras y aumentar el consumo de mariscos. Ciertas vitaminas y minerales también pueden ser útiles, como la vitamina A y E, al reducir y contrarrestar la producción de nuevos quistes y mejorar el dolor de mama.
  3. El consumo de linaza con regularidad, en algunos estudios a demostrado resultados favorables para su recomendación en el manejo del dolor de mama.
  4. Reducir el consumo de azúcar y grasas.
  5. Usar un sostén o sujetador adecuado adaptado a la contextura y tamaño de las mamas para evitar que el efecto mecánico de una mala elección genere dolor.
  6. En algunos casos el uso de analgésicos tipo AINES (antiinflamatorios no esteroideos) como el ibuprofeno o diclofenaco, puede resultar favorable para reducir los síntomas premenstruales y el dolor de mama secundario.
  7.  Las recomendaciones sobre el uso de anticonceptivos orales, progestágenos, fármacos antiestrogénicos u otros, dependen de las características de cada paciente y no se pueden recomendar de manera general, siendo necesario la evaluación especializada por el médico, para mayor seguridad y eficacia del tratamiento.